El Instituto
El Instituto ha sido siempre crisol de las más diversas opiniones vinculadas al ejercicio periodístico en Cuba...
Autor: Dario Machado
Licenciado en Ciencias Políticas y Doctor en Ciencias Filosóficas. Preside la Cátedra de Periodismo de Investigación y es vicepresidente de la cátedra de Comunicación y Sociedad del Instituto Internacional de Periodismo José Martí.
Acerca de la representatividad
Lo nuevo significa ejercer la crítica constructiva y fomentar la autocrítica, enaltecer la unanimidad, logrando que sea ajena a todo formalismo....
La fuerza invencible de la solidaridad
Al lado del sacrificio de los bomberos muchos de ellos jóvenes que dieron su vida por protegernos a todos, el egoísmo, el individualismo, el sálvese-quien-pueda resaltan por condenables y emergen v...
El abismo de la democracia
La cubana es una democracia, como todas, con sus virtudes y sus carencias e imperfecciones, que no excluye la legitimidad de otras formas de democracia...
Lo que nunca quisiéramos los cubanos
Los cubanos no podemos imaginarnos divididos en estratos sociales, no sería martiano ni fidelista, tampoco —por supuesto— revolucionario ni socialist...
La rendición de cuentas: continuidad y cambio
El poder popular renace porque, no obstante las dificultades, las deficiencias y las necesidades insatisfechas, preserva su contenido de poder del pueblo...
Ideología socialista y mipymes
Uno de los asuntos fundamentales que debe atender la actividad ideológica se refiere, precisamente, a la emergencia creciente de estos emprendimientos privados en la sociedad cubana...
Una revolución de hechos, no de promesas
Fieles al legado de Fidel, nuestro partido y gobierno tampoco se distinguen por las promesas, y sí por trabajar con denuedo y en colectivo para hacer realidad los objetivos en múltiples ocasiones ap...
La decisiva lucha contra el burocratismo
El enfrentamiento al burocratismo no puede ser una campaña, tiene que convertirse en un propósito permanente...
El papelazo de Lacalle
Y queda muy, pero muy mal Lacalle ante los pueblos, y no solo por necio, sino por soberbio y arrogante...