Los organizadores de la Feria del Libro en la provincia no quisieron pasar por alto el cumpleaños 90 de Fidel, y convocaron a un conversatorio en el Mausoleo a los Mártires de Artemisa, protagonizado por figuras que han conocido de cerca al líder del proceso revolucionario cubano.
La periodista Katiuska Blanco, autora de Todo el tiempo de los cedros y Guerrillero del tiempo, vinculadas a la fecunda historia de la familia Castro Ruz y a su más célebre integrante, contó sobre el permanente sentido de la creación que existe en Fidel, su constante preocupación por el destino del planeta y el hombre, y su atinado modo de aprender hasta de aquellos seres en apariencia más anodinos.
Katiuska recordó innumerables frases y consejos útiles escuchados a este líder, poseedor de un optimismo que lo lleva a afirmar: “Si la humanidad solo fuera a vivir diez años, tendríamos que luchar por ella hasta el día antes de morir”.
Dos asesores del Consejo de Ministros, los campesinos Juanito Gómez y Mario Fiandor, relataron sus numerosos contactos con Fidel y la pasión de este por conocer todos los pormenores de la agricultura y el empleo más eficaz de la tecnología en esta rama productiva.
Marlon Méndez, el niño ariguanabense que colecciona fotos e imágenes del autor de La historia me absolverá, narró su inesperado encuentro con él y el impacto que produjo en su vida. Mientras, su coterráneo José Rolando Iturria se remontó a inicios de la Revolución, en 1959, cuando Fidel arribó a su vivienda en San Antonio de los Baños, y su abuela le pidió no renunciar al cargo de Primer Ministro.
Jaime Massó, periodista de ArTv y Margarita Callamo, directora provincial de Cultura, también revelaron pormenores acerca de sus encuentros con el líder histórico, y Mabel Martínez, directora del Mausoleo, detalló las emociones vividas en cada visita de Fidel a este lugar.
La actividad contó con la presencia de José Antonio Valeriano, miembro del Comité Central y Primer Secretario del Partido en Artemisa, entre otras autoridades.
(Tomado de El Artemiseño)
