IDIOMA ESPAÑOL

El mismo “mismo” que mal usamos

Resulta una constante en el habla y la escritura del cubano de hoy el empleo del término mismo, -a, en función sustantiva. Esta palabra proviene del latín vulgar metipsĭmus, combinación del elemento enfático -met, que se añadía a los pronombres personales. Es un adjetivo y significa “idéntico, no otro”, “exactamente igual”; por eso solo puede funcionar como tal, como adjetivo. Sin embargo, prolifera el error muy, pero muy común de emplearlo como sustantivo en expresiones como: la misma resulta interesante.

Con el objetivo de reproducir un sustantivo ya mencionado en el texto pueden usarse los pronombres demostrativos —este, ese y aquel, y sus variantes según el género y el número—. También el adjetivo dicho, -a, que precisamente significa “mencionado antes” y cuya utilización justifica la repetición del sustantivo.

De igual forma, puede construirse la idea con el empleo de los pronombres relativos: que, quien, cual y cuyo, y sus respectivas variaciones de acuerdo con los accidentes gramaticales de género y número (que es invariable, quien y cual solo tienen número, y cuyo posee ambos).

Como cualquier otro adjetivo, puede ser sustantivado si se le antepone el artículo neutro lo. Así puede decirse lo bello, lo valiente, lo decisivo, lo mismo…; pero no ocurre así si le anteponemos el artículo femenino o masculino.

Vale tener en cuenta que si añadimos mismo, -a, a los pronombres personales y a algunos adverbios, construimos un pleonasmo —figura que consiste en emplear algún vocablo innecesario, para añadir expresividad—: Yo mismo lo haré./ Aquí mismo te espero./ Hoy mismo llegará./ Además, como refuerzo enfático, a menudo aparece en la versión del diminutivo: Ahí mismito estaba.

Resultan muy usadas la frase adverbial así mismo o asimismo —puede escribirse separada o junta—; las expresiones lexicalizadas dar o ser lo mismo, en el sentido de indiferencia, y la frase conjuntiva causal por lo mismo, que significa “a causa de ello”.

Estar o hallarse en las mismas es una frase hecha mucho más coloquial. Se considera ajeno a la norma culta general el uso de mismamente, en los sentidos de justamente o cabalmente y de hasta o incluso, que se dan en algunas zonas de España y América.

La frase dueño de sí mismo, se refiere a “aquel que sabe dominarse y no se deja arrastrar por los primeros impulsos”.

Muchas personas, incluso algunas muy cultas, cometen el error de emplear mismo, -a en función sustantiva y no se percatan de ello: resulta tan común su empleo y tan conocido su significado que, probablemente muy pocos se hayan dirigido al diccionario y hayan constatado que esa palabra es un adjetivo. Así de sencillo.

Foto del avatar
María Luisa García Moreno
Profesora de Español e Historia, Licenciada en Lengua y Literatura hispánicas. Periodista, editora y escritora.

One thought on “El mismo “mismo” que mal usamos

  1. Hola, muy bueno y reiterado el comentario sobre el vocablo MISMO enel habla y la escritura del cubano de hoy. La utilización, aun en el habla culta, del vocablo MISMO con función sustantiva, es constante.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *