Nacida en Italia, su origen latino le permitió entrar rápidamente en la escena de México, ver más allá del lente de su cámara.
Todo lo que sabe de fotografía, lo atribuye a su maestro, el estadounidense Edward Weston.
Tina dijo que nunca podía haberse desarrollado en Italia como lo hizo en México. Ella tenía un amplio margen de expresión. Sus fotos de flores blancas o rosas tienen una sensualidad tropical.
La influencia del pintor Diego Rivera y la actitud que tomó contra el fascismo la llevaron a un compromiso social. Los temas de sus fotos están inmersos en el pueblo; la guitarra y la canana reunidas para simbolizar al pueblo mexicano.
Tina se consideró una fotógrafa y nada más. Dijo: “Trato de producir fotografías honradas, sin trucos y manipulaciones”.
En enero de 1929 ella estaba con Julio Antonio Mella cuando este fue asesinado en plena calle. Esta mujer, artista y sensible, fue arrestada y expulsada de México en 1930; viajó a Moscú, abandonó la fotografía y se destacó en la actividad política. En 1938 regresó a México y comenzó de nuevo a hacer fotografías.
Su muerte en 1942 fue conmemorada con un poema de Pablo Neruda.
Imagen de portada: Retrato de Julio Antonio Mella, México (1929). Tina Modotti. Tomada de Internet.






