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Artemisa y el cuento de lo cotidiano

Julio García Luis ha estado en las once asambleas previas al XI Congreso de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) realizadas hasta el momento en las provincias del país. Y es que existe en el periodismo cubano un pacto con su memoria; por eso, parece que pide la palabra y explica a través de la voz de cualquier periodista el significado de la libertad de prensa, la necesidad de “pasar de un periodismo adjetivo a uno sustantivo”, la urgencia de “abordar las zonas de silencio de nuestra información”, de aplicar la crítica y la autocrítica, de estampar la cotidianidad con un sentido ético y con un lenguaje “claro, razonado y directo”.

En Artemisa, este jueves, por ejemplo, Yarima Córdova, directora del telecentro, lo recordó entre muchos pensamientos, uno de ellos mencionaba cómo “la prensa cubana no es la solución de todos los problemas pero puede ayudar a resolver muchos”.

Ahí – apuntó Yarima – está el secreto de todo lo que podemos lograr desde nuestro periodismo.

Lo que vino después de la presentación del informe de trabajo, a cargo de la reelecta presidenta de la organización en la provincia, Odalis Acosta Góngora, fue otra clase de periodismo, cuyos docentes fueron más allá de los misterios del lead y hablaron sobre presupuestos, inversiones, proyectos constructivos, estrategias de comunicación, publicidad y autonomía.

Todo eso en consonancia con una de las intervenciones de Ricardo Ronquillo Bello, presidente de la UPEC, cuando expresó: “Debemos aprender a utilizar nuestros recursos, a modernizar nuestros discursos y a cambiar nuestras estéticas”.

Frente a esos intereses también se plantean obstáculos, algunos técnicos como la inhabilitación del sitio web de Radio Ariguanabo – según explicó el periodista José Anibal Ramos – pero que requieren de soluciones pragmáticas como la expansión de sus contenidos en las redes sociales; algo que al gobernador del territorio, Ricardo Concepción le pareció acertado y sobre lo cual – precisó – habrá que trabajar más para mostrar al municipio como “la potencia cultural” que es.

Al respecto, coincidió Ronquillo Bello e insertó el chip que después provocó la dilatación del debate: “la posibilidad de convertir a Radio Ariguanabo en una radiotelevisora”.

Maylen Perdomo – “la directora que no quería ser directora” de la emisora – afirmó que esa idea “era un sueño nacido” en su colectivo hace algunos años y depositado en quienes ayuden a cumplirlo.

Sin embargo, la intervención de Isnail Albiza, director de Radio Artemisa ayudó a entender lo que representan las transformaciones en los modelos de gestión de la prensa.

En ese sentido habló sobre los bajos salarios y las categorizaciones a los periodistas según el alcance del medio, un sinsentido que debe quebrarse “para que todos ganen lo mismo”.

También enfatizó en la importancia de que se cumpla con la estimulación salarial de quienes la merezcan, un componente que evitará el éxodo de los profesionales hacia otros sectores productivos.

La superación profesional y las salidas presupuestarias que en los medios deben garantizarla, ocuparon una parte importante de la discusión.

El periodista de el artemiseño, Alejandro Lóriga propuso que los cursos de formación se impartieran en las casas de la prensa de cada territorio, lo cual representaría un gasto menos para los medios.

Hace nueve años, cuando Yudaisis Moreno tomó la dirección del diario, se imprimían 25 mil ejemplares, ahora son 12 mil que en lugar de los martes, llegan los miércoles desde Villa Clara para ser distribuidos a partir del jueves.

“De ahí que – señaló Yudaisis – miramos al espacio digital que es donde está nuestra audiencia” y con un equipo integrado por profesionales graduados en las distintas carreras de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana tienen – agregó – “mucho que aportarle al modelo de gestión de la prensa al que se aspira”.

Por su parte, Gladys Martínez Verdecia, primera secretaria del Comité Provincial del Partido en Artemisa, refirió su preocupación sobre la ausencia de alguno de los medios de Artemisa o Mayabeque, las provincias más jóvenes del país, en el experimento previsto para la prensa.

“Necesitamos que los organismos rectores de políticas – dijo – entiendan las diferencias entre estas dos provincias y el resto del país”, pues – añadió – “no basta con la capacidad de escuchar, también se requieren soluciones” y la inserción de algún medio artemiseño o mayabequense en el denominado experimento, enrumbaba algunas soluciones previstas en el ensayo de los cambios económicos y editoriales de la prensa.

Saylis Uria, también del periódico el artemiseño, conversó sobre las trabas institucionales que se plantean ante el tratamiento de determinados temas. “Si vamos al congreso de los cambios, tenemos que cambiar nuestra relación con las fuentes, pues nuestra función es decir la verdad, pero esa verdad necesita ser contada desde distintos puntos de vista”.

Finalmente, en la asamblea fue elegido el nuevo ejecutivo provincial, los delegados a la sesión final del XI Congreso, y los integrantes de la comisión provincial de ética. Asimismo, fueron integrados reconocimientos por su trayectoria destacada como miembros de la UPEC y a los ganadores del concurso provincial de periodismo Joaquín Nicolás Aramburu.

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