COLUMNISTAS

Soledad, una mujer sol

Soledad Cruz Guerra, quien acaba de recibir conmovida el Premio Jorge Enrique Mendoza por la obra de la vida en la prensa escrita cubana, es entre las mujeres soles de nuestro gremio, un rara avis de agudo pensamiento y elevado vuelo espiritual.

No sé por qué, me imagino que hoy también se está premiando a aquella inquieta niña de los campos y los ríos de Florida, en la llanura camagüeyana, que entreveía casi todo a su alrededor, y descubría los misterios de la vida y del corazón en contacto dialógico con la Naturaleza.

Soledad es una leyenda en el periodismo revolucionario cubano, sin concesiones a la mediocridad ni a esa planicie de los conformistas. Guerrera sin ataduras ni temores, voz muy personal para cantar los colores y las luces de la existencia, y también revelar las sombras, los pantanos y las fealdades que nos acechan. Mucho le debemos a esta irreverente y profunda mujer ya inclonable, ajena a la inteligencia artificial y todo lo tecno, con sus hondos juicios y alertas.

A Soledad habrá que agradecerle siempre esa mezcla tan  difícil de maestría conceptual e imaginación, ese kolimador iridiscente conque enfoca los asuntos públicos, sin pedir tantos permisos y avales. Ella rescató el columnismo sustancioso y vivaz y la polémica en la prensa cubana, cuando muchos bostezaban de repetir monolíticamente orientaciones rutinarias y exhortaciones aburridas y sin alma.

Claro que Soledad ha sido controversial en su vida personal y su obra periodística. Ese ha sido el costo de su sinceridad sin límites y su apego a la justicia y la belleza. Ni siquiera los que hubieran querido callarla, la pudieron frenar, ante su consecuente filiación revolucionaria mientras otros, sin las pruebas que la vida le ha puesto a ella, se desploman y cruzan la frontera de la fidelidad.

Juventud Rebelde tendrá siempre el orgullo de haberla tenido desafiante en lo mejor y más florido de sus páginas. Los archivos guardan, como un tesoro para el futuro, las  joyas de sus comentarios y crónicas desafiantes. Y el periodismo cubano estará siempre en deuda con ese inquieto talante de una mujer que no se ha cansado jamás de soñar y soñar, por más golpes  que le de la vida.

El ilustre jurado que concedió este premio, ha hecho un acto de justicia supremo. Y ha venido a darnos un espaldarazo a tantos que queremos y admiramos a Soledad Cruz Guerra.

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José Alejandro Rodriguez
Periodista cubano. Labora en el periódico Juventud Rebelde. Recibió el Premio Nacional de Periodismo “José Martí” en el 2013.

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