La directora del grupo RT, Margarita Simonián, ha denunciado en su cuenta de Twitter que el editor jefe de la agencia rusa Sputnik en Estambul, Mahir Boztepe, ha sido detenido este domingo.
Boztepe ha comunicado que se sometió a un examen médico en un hospital y en estos momentos lo están trasladando a una de las oficinas del Departamento de Seguridad. Según el periodista, los agentes no han usado la fuerza contra él.
“Otros tres [empleados] nuestros desde el día de ayer se encuentran detenidos por la Policía en Ankara, donde los nacionalistas irrumpieron en sus apartamentos la noche anterior”, ha señalado Simonián, quien también dirige la agencia de información internacional Rossiya Segodnia, grupo al que pertenece la agencia Sputnik. Los tres son ciudadanos turcos.
Los tres periodistas fueron llevados por las autoridades turcas al Palacio de Justicia para prestar declaraciones, a pesar de que momentos antes la Policía de Ankara aseguró que no tenía a estos periodistas bajo su custodia, ha indicado Simonián a través de su cuenta en Twitter. Subrayó que hasta el momento no ha sido posible contactar con ellos.
Después de que estos profesionales prestaran declaración, han sido liberados. De acuerdo con el protocolo de interrogatorio, la Fiscalía turca no ha encontrado elementos de delito en las acciones de ninguno de los tres periodistas de Sputnik.
Para solucionar la situación con los empleados detenidos de la agencia de noticia rusa Sputnik, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ha mantenido una conversación telefónica con su homólogo turco, Mevlut Cavusoglu, subrayando la necesidad de encontrar una resolución rápida.
La noche de este sábado, estos empleados de la agencia rusa acudieron a la Policía después de que, en sus casas en Ankara, irrumpiera una decena de personas no identificadas, gritando consignas nacionalistas y acusándolos de traicionar y espiar.
Los agresores “amenazaban” y gritaban a los periodistas que eran “traidores a la patria porque trabajan para los rusos”. Según sus declaraciones, los presentes coreaban “Turquía para los turcos”, mientras llamaron a los corresponsales “espías rusos” y “traidores”.
Los tres empleados de la agencia rusa fueron detenidos, después de que denunciaran estos hechos ante la Policía.
Por su parte desde la agencia han especificado que policías turcos, alrededor de 13:20 de este domingo, han entrado en la oficina de Sputnik en Estambul, reclamando una reunión con los representantes de este medio con sede en Rusia.
“En ese momento, en la oficina se encontraban solo los empleados de turno. Los policías han declarado que no abandonarán el edificio hasta que se reúnan con los representantes de la agencia”, reza el comunicado de Sputnik.
Se ha llevado a cabo una reunión entre el representante de Sputnik en Estambul, Maxim Dúrnev, los abogados de la agencia, los representantes del Consulado general ruso en Estambul y la Policía turca.
Luego, los policías han procedido a registrar la oficina de Sputnik. Los agentes disponen de la orden judicial correspondiente emitida por la Oficina del fiscal general de Estambul, según informó Dúrnev.
REACCION DESDE MOSCU
El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso calificó el ataque contra los empleados de Sputnik, y su posterior detención, como una grave violación de los derechos de los periodistas.
“Según la información disponible, desde ayer por la noche las víctimas del ataque están detenidas por las fuerzas de seguridad turcas. La situación se complica por el hecho de que no es posible establecer ningún contacto con ellos”, han denunciado desde el Ministerio.
Asimismo, la parte rusa instó a las autoridades turcas a intervenir en la situación y garantizar la seguridad de los medios de comunicación rusos y ayudar a aclarar todas las circunstancias del incidente.
Mientras, el grupo mediático Rossiya Segodnia solicitará una reacción de la ONU, la OSCE y la Unesco a la detención de sus empleados.
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